La Psicología es la ciencia que estudia la conducta del ser humano, de acuerdo con su etimología (derivada de “psyche” que en griego significa “alma” o “espíritu” y logos que significa “estudio” o “tratado” entonces equivale a decir el estudio del alma o de la mente.[1] Teniendo claro que en cierta manera la Psicología trata de establecer y observar todo lo relacionado con lo interno y externo del ser humano con sus actitudes y aptitudes.
Alfredo Fierro nos da un importante aporte: define a la adolescencia, desde el plano de lo psicológico, como el "período de transición de la infancia a la adultez", es decir, como un "período preparatorio para la edad adulta"[2] y de recapitulación de la pasada infancia, de toda la experiencia acumulada y ahora puesta en orden.
La adolescencia es una época de muchos cambios físicos y psíquicos. Para la mayoría de los padres de familia, es una etapa de la vida bastante tormentosa, pues es cuando se crea el sentido de la identidad propia; donde los adolescentes no les obedecen a sus padres. Es en esta etapa de la vida cuando los adolescentes se plantean sus valores, empiezan a tomar decisiones con respecto a su futuro laboral y, para muchos, el comienzo de la sexualidad. Cualquiera de estos aspectos puede crear conflictos, máxime cuando el adolescente se enfrenta con presión social, pues es una época de mucha lealtad en las amistades donde se valora mucho la imagen y la aprobación social de los iguales.
Teniendo claro el concepto de Psicología y Adolescencia se deduce que la Psicología del Adolescente es: el estudio del comportamiento de los niños desde el nacimiento hasta la adolescencia, que incluye sus características físicas, cognitivas, motoras, lingüísticas, perceptivas, sociales y emocionales
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